Aunque solo de pensarlo nos angustiemos, por el bienestar de nuestros hijos menores es muy importante designar en el testamento la persona o personas que se encargarían de ellos y de administrar sus bienes si nosotros faltamos.
Hace unos días compartimos con vosotros un artículo sobre “Las 5 ventajas de hacer testamento en vida”. Hoy queremos ir un paso más allá y añadir la importancia de dejar reflejado en nuestro testamento quien sería el tutor/a legal de nuestros hijos menores en caso de fallecimiento de ambos progenitores.
¿Qué es un tutor legal?
Un tutor legal es la persona encargada del cuidado de los menores y de la administración de todos sus bienes en caso de fallecimiento de ambos padres y siempre bajo la supervisión judicial. En el caso de la administración el tutor debe rendir cuentas de ella, y no podrá realizar actos de disposición del patrimonio de los menores sin autorización judicial.
El artículo 234 del Código Civil es el que regula la figura del tutor legal en España.
Incluir la figura del tutor legal en nuestro testamento tiene una importancia vital en caso de haber hijos menores, sin embargo, es habitual olvidarse de ella.
En caso de fallecimiento de uno de los padres, los hijos quedan a cargo del otro, pero en caso de fallecimiento de ambos, de manera conjunta o sucesiva ¿quién cuidará de nuestros pequeños?
La vida es imprevisible, y no sabemos lo que puede ocurrir en cualquier momento. Por este motivo es fundamental ser previsores, y de la misma manera que nos preocupamos por quién heredará nuestros bienes y deudas, debemos dejar por escrito quien deseamos que cuide de nuestros hijos menores para que no se queden desprotegidos.
Respondemos ahora a las 5 preguntas más habituales que nos hacen los padres cuando llega el momento de designar un tutor legal.
¿Qué requisitos tiene que cumplir una persona para poder ser tutor legal?
Ser mayor de edad, estar en pleno ejercicio de sus derechos civiles, no tener antecedentes penales y gozar de una buena relación con los menores tutelados.
¿Cuáles son las funciones de un tutor legal?
Su función principal es la guarda y custodia de los hijos, es decir su cuidado como lo haría un padre y/o una madre. Además, deberá rendir cuentas periódicas al juez, para justificar la gestión patrimonial que realiza sobre los bienes de los menores.
¿Se puede designar a varios tutores legales?
Sí, y es bastante común que los progenitores nombren a un tutor para cuidar a los menores, y a otro para administrar sus bienes. Depende de distintos factores como del volumen de herencia que tengan, de la complejidad de los activos, de las habilidades de los tutores, etc.
¿Es obligatorio que la persona designada acepte el cargo de tutor?
No, la tutela nunca es obligatoria, independientemente de si los padres lo dejaron por escrito en el testamento, la persona designada puede decidir no aceptar. El Juez siempre preguntará al propuesto como tutor legal si acepta el cargo.
¿El cargo de tutor legal es para siempre?
No, el mandato del tutor se extingue cuando cesan las causas que le dieron origen. En el caso que tratamos aquí de cuidado de menores, cuando los menores cumplen la mayoría de edad la tutela termina
También el propio tutor puede dejar de serlo porque quiera o porque se compruebe que no es el adecuado para los menores. Antes de cesar en sus funciones deberá rendir cuentas.
En resumen, si tienes hijos menores de edad te recomendamos que incluyas en tu testamento quien o quienes serán sus tutores legales, y evitar que vuestros hijos queden desprotegidos.
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