De manera reiterativa he recibido consultas acerca de esta situación tan desagradable que supone romper con la confianza depositada en una persona a la que hemos abierto de par en par las puertas de nuestra casa.
Evidentemente debemos despedir a esta empleada, pero cuidado con cómo lo hacemos para que no sea declarado improcedente.
Con este breve post os aclaro cómo debemos actuar:
Lo primero y más importante es denunciar. Teniendo en cuenta el valor de lo sustraído y que esa denuncia puede ser un elemento importante para poder acreditar que el tipo de despido al que se procede es el acertado.
Desde el momento en que nos demos cuenta de las sustracciones, hemos de ponerlo en conocimiento de la empleada.
Denunciarlo y proceder al despido procedente por falta muy grave a los deberes de lealtad y confianza.
IMPORTANTE: Si no podemos probar esas sustracciones, no se ha interpuesto denuncia alguna o la empleada de hogar no reconoce los hechos, tendremos que desistir de la relación contractual por desavenencias.
En cualquier caso, la empleada de hogar siempre podrá realizar las actuaciones pertinentes si considera que su despido es improcedente.
En esta situación tendrá especial relevancia a efectos probatorios que hayamos interpuesto una denuncia y el resultado de ésta.
Para finalizar os apunto un detalle importante, , y para el caso de que haya una sentencia condenatoria, esto á ó / .
Una sentencia por un delito de hurto acarreará la tenencia de antecedentes penales, pudiéndose producir siempre atendiendo al caso concreto, o bien por parte del Juzgado la sustitución de la pena por la expulsión de España, o bien posteriormente que se le extinga su autorización o que no se le renueve cuando llegue el momento de ello.
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